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¿Por qué no pican?

martes, 2 de abril de 2013



Los peces son, sin duda, animales impredecibles. Nunca podemos saber con antelación cómo se van a comportar en cada caso, resultando totalmente imprevisibles. ¿Por qué un día funciona bien un cebo y al día siguiente no?, ¿por qué con idénticas condiciones de marea, viento y oleje un día obtenemos resultados y al siguiente nos llevamos un bolo?...

Pesca surfcasting
Jon R. Friedman

Tal vez es esta total incapacidad de prever lo que va a suceder en una jornada de pesca lo que nos engancha al surfcasting. Es como si en cada ocasión se nos planteara un nuevo reto, del que nunca estamos muy seguros si vamos a salir airosos.

En este artículo trataremos de analizar el por qué de algunos comportamientos desarrollados por los
peces. Estamos seguros de que si intentamos comprenderlos un poco mejor podríamos mejorar nuestros resultados de pesca.


POR MOMENTOS
Todo pescador ha tenido en alguna ocasión la posibilidad de comprobar que el comportamiento de los peces puede variar no sólo de un día a otro, sino de un momento a otro. Comenzamos a pescar y notamos una incesante actividad, los peces no paran de picar e invariablemente nosotros pensamos “vaya día, hoy cargo”; sin embargo, sin que exista un motivo ni explicación aparentes, de repente dejan de picar y la actividad cesa por completo… .

No ha cambiado nada en la climatología, la marea es prácticamente la misma, no se ha levantado viento, no se ha hecho de día… ¿qué coño les pasa a estos peces?

Desde luego en la pesca no existen reglas fijas pero sí que es cierto que la experiencia marca una serie de pautas que debemos aceptar como adecuadas a nivel general, aunque por supuesto no serán totalmente ciertas para todas las jornadas de surfcasting.

La primera de estas “pautas” la conoce todo pescador: los mejores momentos del día para la pesca son los del amanecer y los del anochecer (o lo que es lo mismo, el orto y el ocaso).

surfcasting al amanecer


POR ESPECIES
Resulta evidente que cada especie en particular cuenta con una serie de costumbres. Incluso una misma especie, en diferentes zonas, podrá desarrollar actitudes distintas.

Debemos por tanto estudiar y analizar el comportamiento de la especie que intentamos capturar teniendo en cuenta que su comportamiento variará dependiendo de la zona donde se encuentre.

A pesar de ello y a nivel general podemos definir una serie de comportamientos “típicos” por especies. Unos buenos ejemplos son:
  • Herrera: gran madrugadora, sus capturas se realizan principalmente a primeras horas del día.
  • Lubina: no le suele afectar el horario, pero sí el estado de la mar, la existencia de mareas y corrientes.
  • Sargo: pez noctámbulo donde los haya.
  • Doradas: son principalmente especies diurnas, gustando especialmente los días de sol.

LA INFLUENCIA DE LA LUNA EN LA PESCA
La influencia lunar en la pesca ha sido estudiada desde siglos atrás, cuando la pesca no era una actividad de ocio sino de pura necesidad. Aquellos primeros pescadores se guiaban por una sencilla regla: los mejores momentos para la pesca coincidían siempre con la luna colocada justo encima de sus cabezas o, todo lo contrario, con la luna a sus pies.

influencia de la luna en la pesca

La luna influye en mayor o menor medida sobre todos los animales de la tierra (y entre ellos debemos incluirnos nosotros mismos.

En lo que tiene que ver con la pesca, también las estadísticas hablan: la gran mayoría de los grandes récords conseguidos a lo largo del tiempo se han logrado en los días de luna llena y nueva, y si afinamos un poco más durante los cuatro días siguientes al punto de inflexión llena-menguante o nueva-creciente.

El ciclo de alimentación e incluso el de reproducción en muchos casos, se ve influenciado por la actividad lunar. La luna actúa como un elemento de referencia para sincronizar los relojes biológicos de los diferentes organismos, los cuales regulan algunos procesos orgánicos y del comportamiento.

Estos ritmos internos permiten a los animales anticiparse a las condiciones favorables, y no reaccionar a ellas después de que se producen. Es decir, una especie puede aumentar su actividad y la búsqueda de alimento siguiendo las fases lunares, siempre y cuando sus presas también muestren cambios de comportamiento relacionados con la luna.

EL MEJOR CEBO PARA PESCAR
Sin duda este es un tema que da para hablar largo y tendido, no podemos hablar de un cebo universal eficaz para todas las especies, ni siquiera un cebo infalible para una especie en concreto.

Tal y como sucede con la gran mayoría de las afirmaciones que se hacen en el mundo de la pesca, puede que este delicioso bocado sea rechazado por la misma especie que antes lo aceptó con gusto, en función de la zona en concreto donde intentemos capturarla.

Pero lo que sí es seguro es que una buena presentación de nuestros cebos es fundamental para aumentar las picadas. Podéis ampliar información sobre la correcta presentación de los cebos en esta entrada.

4 comentarios

  1. Hola compañero,
    Razón no te falta en esta entrada, afortunadamente la pesca no es una ciencia exacta de ahí su encanto.
    Saludos
    Alex

    ResponderEliminar
  2. Hola Alex

    Efectivamente la incertidumbre es uno de los factores por los que atrae tanto la pesca. Pero también hay que decir que cuando encadenas un par de jornadas sin resultados empiezas a dudar de todo!

    un saludo

    ResponderEliminar
  3. muy bueno ya se sabe que esto no es una ciencia tenemos que probar cada playa hasta agotar las posibilidades menos mal que llega el buen tiempo para probar las noches y que entren esos sargos apañaos
    Saludos buen reporte

    ResponderEliminar
  4. Desde mi punto de vista y la experiencia que tengo es la marea si sube la marea desde luego tendrás una buena pesquera si la marea baja no hace falta ni que vaya y las doradas siempre les gusta agua limpia quiero decir el viento viene a favor teda en la espalda

    ResponderEliminar

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